17.4.08

Nº 32, Año 1, 2ª Epoca

Hoy hace un año que me puse manos a la obra para restaurar mi cuerpo, ya hacía un tiempo que tenia la decisión tomada, pero aún tardé un poco a dar el paso definitivo, que me ha traído hacia donde estoy ahora, más consciente, más alerta y cuidadoso con lo que le hago a mi cuerpo, con lo que lo alimento y con lo que lo purifico, por que solo tengo este y es de un único uso.

Dice mi dietista, a quien le agradezco infinitamente su buen hacer, que soy la envidia del barrio, que soy el espejo en que se miran las demás personas a las que lleva, eso me alaga y me da fuerzas para seguir "por el buen camino", el cual no es fácil de seguir, pero no imposible, doy fe de ello.

Después de un año, varios cientos de kilómetros, mil y pico comidas y 30 kilos perdidos por el camino, veo la vida de manera diferente, me noto más equilibrado, sereno, el esfuerzo y el dolor han servido para cambiarme por fuera desde dentro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y vaya tipin que se te ha quedado, macizon. Que pasa maxote, a ver si hablamos esta semana que me tienes abandonado, bandido de mi corason, ja ja!!!